Playas de Vélez-Málaga

Sobre su fundación existen una serie de leyendas que se confunden con la realidad. Unas sitúan en este lugar a Sexi, la capital de la antigua Sexitania, otras debe su fundación a Beluz, el Hércules libio, que dio nombre a la ciudad. Una tradición cristiana defiende la presencia de S. Pedro en este lugar. Los datos confirmados por las excavaciones realizadas prueban que Vélez estaba ya habitada en época prehistórica. Se han encontrado, cerca de la desembocadura del río Vélez, los muros de una ciudad fenicia en la finca los Toscanos, una necrópolis en la finca el Jardín y en la Noria Alta. Vélez debió ser un núcleo urbano relevante desde época romana, y acogería a la población que abandonó la costa a la caída del Imperio; pero es a partir del período hispano musulmán cuando este asentamiento adquiere notoria importancia. En el siglo XIII, la ciudad fortificada de Vélez, junto a la de Comares y Bentomiz, aparece como una de las plazas de mayor rango de la actual provincia de Málaga; prueba de ello es la alianza que establece el rey cristiano Fernando III, el Santo, con el rey nazarí Al-Hamar. Las crónicas del viajero Ibn Batuta (1304-1368) describen Vélez como una ciudad próspera, con una activa relación mercantil en el reino granadino y con las ciudades mediterráneas desde su puerto comercial de Mariyya Balis -Atalaya de Vélez- (Torre del Mar). En abril de 1487 fue conquistada por las tropas de los Reyes Católicos. La caída de Vélez Málaga fue la clave para la posterior rendición de Málaga. La villa portuaria de Torre del Mar crece después de la conquista cristiana protegida por el castillo -que aún conserva parte de sus murallas- de Ruí López de Toledo, distinguido militar de las tropas castellanas que recibe este enclave militar tras su actuación en la toma de Vélez. Ya en el siglo XVIII, frente a las costas veleñas se produce (1704) una de las batallas navales más significadas de la Guerra de Sucesión. La escuadra franco-española y la flota anglo-inglesa se enfrentan en un duro combate en el que llegarían a intervenir 146 naves y casi 50.000 hombres. La lucha no daría la victoria definitiva a ninguno de los contrincantes y terminaría con la retirada de los ingleses y holandeses al puerto de Gibraltar y de la flota franco-española al de Málaga. Otro episodio notable en la crónica histórica de Vélez-Málaga se produce durante la Guerra de la Independencia, cuando las tropas napoleónicas, en su retirada, volaron las murallas de la ciudad quedando éstas prácticamente en ruinas. También fue afectada la villa y su término municipal por el importante seísmo, llamado el Terremoto de Andalucía, del 25 de diciembre de 1884; produciendo seis víctimas mortales y cuantiosos daños materiales. Un nuevo impulso, que viene a cambiar definitivamente la fisonomía de Vélez-Málaga, su anejo de Torre del Mar y todo su término municipal, así como la actividad económica y la forma de vida de sus habitantes, se produce en la segunda mitad del siglo XX, cuando el progresivo desarrollo turístico, que se inicia en los años sesenta, transforma a esta localidad en una de las más sobresalientes del panorama turístico mediterráneo. Personajes destacados Federico E. Vahey y Alba, Ministro de Justicia. Fray Rafael de Vélez, Arzobispo de Santiago de Compostela. Fray Alonso de Santo Tomás, Obispo de Málaga. Luis de Rute Ciner, diputado de Cortes. Enrique Sánchez de León,actor. Juan Breva, cantaor. María Zambrano Alarcón, escritora y pensadora. Antonio de Vélez, pintor. Aurelio Anglada, tenor. Evaristo Guerra, pintor.